Permanece muy quedo por un instante, regresa a tu hogar junto con Él y goza de paz por un rato.



viernes, 12 de noviembre de 2010

La oración de una mariposa





Vino a mí la tristeza como una nave antigua

hendiendo suave el agua

Y de pronto una mariposa se posó en mi palma

Juntando las alas como manos

se quedó absorta en la oración

No había para mí otra acción de gracias

que mantener las manos quietas

La tristeza se hizo luminosa

y la oración de la mariposa

Savita Singh

2 comentarios:

azul dijo...

Precioso!

Gracias por compartirlo querida amiga.

Que tengas un feliz día

Un abrazo muy fuerte

aries dijo...

Gracias a tí Azul

un abrazo fuerte